Texto publicado originalmente en Aire Libre el 29 de octubre de 2021

par de gemelas que actúan siempre como Femme Fatale.
Cuando pienso en Lynch, invariablemente, me viene a la cabeza su divertidísima serie Weather Report o aquél clip que circula en internet en el cual regaña a alguien por querer hacer una escena más corta; es una de esas personas que es placentero ver relajado y enojado. Pero ya, hablando en serio, ver una película (o cortometraje) de este director es sinónimo de sumergirse en un mundo paralelo, donde no se sabe si lo que ves es real o una broma oscura.
Lost Highway (1997) es una de las últimas películas de larga duración que hizo David Lynch (después siguieron Mullholland Drive [1999] e Inland Empire [2006]. Desde entonces, el director ha realizado una gran cantidad de cortometrajes y series de televisión, pero no más largometrajes). La historia gira en torno al asesinato de una mujer a manos de su esposo –el protagonista– quien no recuerda haberla asesinado.

Para Lynch, la trama y la narrativa son importantes para hacer una película, pero es aún más relevante que haya elementos abstractos, piezas de un rompecabezas que no encajan. Lost Highway es una meditación de nuestros actos, una exploración de hasta dónde podemos llevar nuestros deseos y anhelos. La carretera perdida es ese lugar en el cual transitamos: la vida. La gran mayoría de las veces, nos perdemos en sus trazos, sufrimos las consecuencias de nuestros actos. También hay ocasiones en las que logramos encontrar el camino de regreso.
A los 40 minutos de empezada la película, cambia el personaje principal. No entendemos por qué, no sabemos para qué, pero está bien. Este segundo personaje es muy parecido al anterior, un esclavo de sus deseos.

que no pueden pasar desapercibidas.
“Mystery Man” es el personaje más interesante de la película. Tiene pocas apariciones, casi siempre siendo el augurio de algo malo, ¿o el provocador? Mystery Man está la noche en que nuestro protagonista asesina a su esposa. Mystery Man también está cuando nuestro segundo protagonista comete adulterio. Y Mystery Man está en la escena final ayudando a nuestro primer protagonista –porque sí, él regresa y el segundo protagonista, así como llegó, se desvanece– a expiar sus pecados. ¿son buenas o malas las intenciones de este personaje? Eso es algo que sale sobrando; Mystery Man siempre está ahí. Es la pieza del rompecabezas de Lost Highway que ata todo, aunque nunca entendamos bien cómo.
© 2021 Mauricio Tinoco Pérez
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